La postal de los remises en Santo Tomé ya no es la misma. Donde antes abundaban los móviles en las paradas, hoy el movimiento es mucho menor. Según Hernán Escobar, titular de la empresa Virgen de Luján, el sector perdió la mitad de sus vehículos habilitados en apenas dos o tres años. La demanda también se desplomó: se calcula una baja del 45% en la cantidad de viajes.
Las razones son varias y se acumulan como piedras en el camino. Por un lado, los costos de mantener un auto en regla se dispararon: una revisión técnica cuesta unos $40.000 y obtener el carnet profesional puede rondar entre $400.000 y $500.000. A eso se suman los requisitos municipales para reinscribir los vehículos, que terminan golpeando los ingresos de los permisionarios.
Por otro lado, las aplicaciones de transporte irrumpieron con fuerza. Aunque muchas veces sus tarifas superan las del remis, la percepción de los usuarios es distinta: creen que son más baratas y recién descubren el costo real al final del viaje. Escobar denuncia que estas plataformas operan sin habilitación en la ciudad, lo que genera una competencia desigual.
En medio de este panorama, el Concejo Municipal aprobó un aumento del 20% en la tarifa de remises, que comenzará a regir cuando lo promulgue el Ejecutivo. El ajuste llega después de un año sin actualizaciones y, aunque queda por debajo de la inflación acumulada, busca sostener un servicio que se resiente día a día.
El futuro del sector parece depender de una discusión más amplia que se dará en 2026: actualizar la normativa vigente y establecer reglas claras para todos los actores. “No se puede competir contra servicios que operan sin controles”, advierte Escobar.
Mientras tanto, los remises intentan resistir y mantener la confianza de los vecinos. “Agradecemos a quienes siguen eligiendo el remis. Sabemos que no siempre es fácil entender lo que pasa en el sector, pero seguimos trabajando para sostener el servicio y hacerlo cada vez mejor”, concluyó el empresario.
Fuente: Santotomealdía – Corresponsal: Guillermo Schmidt –
Redacción: Libertador